DEMASIADA BONDAD

CUENTO POPULAR

Había una vez un matrimonio con su hijo de doce años y como patrimonio un burro.

No tenían dinero, su trocito de terreno no producía en vista de tanta miseria decidieron viajar, trabajar para alguien y mientras conocer mundo.

Así lo hicieron: se marcharon los tres con su burro un día de madrugada.
Al pasar por el primer pueblo, escucharon comentarios de la gente, al verlos pasar: se reían, rumoreaban, se burlaban: - “Mira ese chico mal educado, él arriba del burro y los pobres padres ya mayores tienen que ir tirando de las riendas. Deben tener los pies molidos”.
La mujer al oír tal comentario, dijo a su esposo; - Juan, no debemos permitir que la gente hable mal del niño.
El esposo bajo el niño del burro y subió él.

Al pasar por el segundo pueblo, la gente también comentaba y murmuraba: - “Mira que sinvergüenza ese tipo; deja la criatura y la pobre mujer que tiren del burro, mientras él va tan ricamente encima del animal”.

Avergonzados, decidieron subir a la madre encima del burro.
Mientras padre e hijo tiraban de las riendas.

Al pasar por el tercer pueblo, otra vez murmullos y comentarios: - ¡”Pobre hombre, después de trabajar todo el día, debe llevar a la mujer sobre el burro! ¡Pobre hijo, que le espera con una madre como esa”!

Cansados de todos los comentarios y risas de la gente de los pueblos que iban pasando, decidieron subir los tres en el burro, para seguir nuevamente su peregrinaje.

Al llegar al siguiente pueblo, otra vez con nuevos comentarios.
-¡”Son unos bestias! ¡Más bestias, que el burro que los lleva! – ¡van a partirle la columna al pobre animal”!

Era tanta la vergüenza que tenían por las críticas que recibían, que decidieron bajar los tres del burro y caminar junto a él.

Siguiendo camino, llegaron a otro pueblo. – ¡Dios mío! – dijo la mujer. ¡-No es posible lo que estoy viendo y oyendo!

- “Ge, ge, ge…..- Mira, a esos idiotas: caminan, teniendo un burro que puede llevarlos”.

CONCLUSIÓN

Siempre te criticarán.
Siempre hablarán mal de ti.
Será difícil, que encuentres a quien conformen tus actitudes.

ENTONCES
¡Vive como creas!
Haz lo que el corazón te dicte.
“La vida es una obra de teatro que no permite ensayos”


POR ESO

Canta, ríe, baila, ama y vive intensamente, cada momento de tu vida antes de que el telón baje y la obra termine sin aplausos.

MARISA, 30/3/08